Según el doctor António Pais Lacerda, director del servicio de Medicina Interna II del Hospital Santa María de Lisboa: "Hay padres infectados en casa que siguen llevando a sus hijos a la escuela" y "personas que siguen yendo a su lugar de trabajo con alguien en casa que está enfermo y no dicen nada porque tienen miedo de recibir un salario menor o de ser juzgados por tener menos capacidad para llevar un ingreso a casa"que resulta ser "una situación social muy grave", informa el director del servicio donde se hospitalizan los pacientes con covid-19 y los sospechosos de contraer la infección.

António Pais Lacerda advierte que las personas tienen que "tomar las precauciones necesarias" y si saben que estuvieron cerca de alguien que está infectado, deben tener cuidado de decir que estarán en cuarentena en su casa.

"Una persona no puede decir que ha estado con una persona que ha dado positivo en el test de covid-19 pero no necesita hacer nada porque se siente bien. Esto es una tontería, esto es lo que nos ayuda a detener la propagación del virus a otros", dijo el doctor a la agencia de noticias Lusa.