Según un comunicado de la Europol (Servicio de Policía Europeo), la acción de la GNR formaba parte de la operación Retrovirus para combatir la eliminación y el transporte ilegal de residuos sanitarios, en la que participaron 30 países y en la que se realizaron aproximadamente 280.000 inspecciones y se detuvo a 102 personas.

Según la Agencia de Noticias Lusa, la Guardia Nacional Republicana (GNR) inspeccionó más de 2.000 empresas, hospitales y centros de salud, habiendo detenido a 30 personas, incautado material por valor de 790.000 euros y emitido multas por infracciones administrativas.

Las autoridades también supervisaron el transporte de desechos médicos a través de la Unión Europea y la policía de la República Checa, Polonia, Rumania y Eslovaquia identificó envíos ilegales, que fueron devueltos al país de origen.

Otra tendencia identificada durante la operación fue la posible contaminación de las aguas residuales urbanas. La Guardia Civil española puso en marcha la operación Arcovid para investigar los tratamientos de filtración de agua para contaminantes y la posible presencia del nuevo coronavirus.

Desde el comienzo de la pandemia, las autoridades policiales han detectado un "potencial crecimiento en el tratamiento y la eliminación ilegal de residuos sanitarios" que ha llevado a las autoridades de varios países a realizar inspecciones en los edificios y el transporte de residuos sanitarios, "que eran cruciales para prevenir el tráfico, almacenamiento, vertido y transporte ilegal de residuos", según Lusa.