En una declaración enviada a la agencia Lusa, la ASAE indicó que había realizado una inspección en esta fábrica de embutidos, a través de la Unidad Regional del Sur, para verificar el cumplimiento de las condiciones de higiene y de trabajo técnico y funcional.

Durante esta operación se puede leer en el comunicado que "se encontró un boletín analítico que confirma la presencia de la bacteria 'Listéria monocytogenes' en una muestra de salchichas", más precisamente "en una morcilla".

"Esta documentación reveló así el incumplimiento de los criterios microbiológicos aplicables a los productos alimenticios y, ante la falta de pruebas de cualquier medida correctiva por parte del operador económico, se determinó la suspensión" de su actividad, "habida cuenta de la posible contaminación de las superficies de trabajo y el equipo", reveló la ASAE.

Los inspectores se incautaron de un total de 360 kilos de embutidos, por un valor de 6.120 euros, en esta acción de inspección, en la que también se evaluó la correcta aplicación del sistema de seguridad alimentaria y el funcionamiento del sistema de trazabilidad de la materia prima utilizada y la calidad del producto final.

La ASAE también ordenó "la apertura de un procedimiento de investigación" a este productor de salchichas del Alentejo "para la obtención de pruebas de delitos penales en relación con la autenticidad, la calidad o la composición de los productos alimenticios y los productos alimenticios defectuosos anormales".