La tasa de ocupación de las unidades de cuidados intensivos de Portugal se sitúa en torno al 94%. Anteriormente, las autoridades dijeron que sólo quedaban siete camas libres en las unidades de cuidados intensivos creadas para los casos de COVID-19 en su territorio continental, lo que ha llevado a las autoridades a enviar a algunos pacientes críticos a Madeira y las Azores. El gobierno ha atribuido el aumento de los casos la decisión de relajar las restricciones durante el periodo navideño, culpando de la velocidad de propagación a una nueva variante detectada por primera vez en Gran Bretaña.