"Tenemos que mantener el actual nivel de confinamiento, ciertamente durante los próximos 15 días y debemos asumir de forma realista que tendremos que mantenerlo incluso durante el mes de marzo", dijo António Costa a los periodistas en el Palacio de Ajuda, en Lisboa, al término del Consejo de Ministros para decidir las nuevas medidas para el estado de emergencia que fue renovado hasta el 1 de marzo por el Parlamento.

En el mensaje inicial, António Costa dio una señal positiva sobre el actual confinamiento y reconoció el "esfuerzo cívico" de los portugueses, afirmando que el confinamiento está dando resultados, con una "reducción de nuevos casos" que se traduce en una disminución significativa del riesgo de transmisibilidad.

A pesar de estos resultados, el primer ministro advirtió que "la situación sigue siendo extremadamente grave".

"Y esta gravedad, si se traduce en el aumento de pacientes hospitalizados, si se traduce en el aumento de pacientes en cuidados intensivos, también se traduce en el altísimo número de muertes diarias. También está disminuyendo, pero no podemos resignarnos a las cifras que todavía tenemos. Son absolutamente inaceptables", subrayó.

Comparando con el máximo de muertes diarias que hubo durante la primera oleada, cuando todos los portugueses se movilizaron "para luchar contra esta pandemia", las cifras que tiene actualmente Portugal "son absolutamente inaceptables", concluyó.