Según un informe de la agencia de noticias Lusa, en 2020, Caixa Geral de Depósitos (CGD), BCP, BPI, Santander Totta y Novo Banco contaban con 169 sucursales menos entre todos en Portugal en comparación con 2019.

Hace dos años, estos bancos sumaban 2.413 sucursales, habiendo reducido ese número a 2.244 en 2020.

El año pasado, CGD terminó el año con 543 sucursales, Santander con 443, BCP 478 y BPI con 422.

En cuanto a los trabajadores, la reducción fue de 1.222 personas en los cinco mayores bancos que operan en Portugal.

En 2019, las cinco mayores entidades tenían, en conjunto, 29.980 trabajadores, y en 2020 ese número se redujo en 1.222, hasta los 28.758, confirmando la tendencia de los últimos años.

A finales del año pasado, en Portugal, CGD tenía 6.583 empleados, Santander Totta con 5.980, BCP con 7.013, BPI con 4.622 y Novo Banco con 4.560.

En 2020, los cinco principales bancos que operan en Portugal registraron una pérdida agregada de 253,9 millones de euros.