Una fuente de la oficina del Secretario de Estado para las Comunidades dijo a Lusa que la embajada portuguesa en Indonesia "se mantuvo en contacto regular" con el ciudadano portugués.

"Hay gestiones en curso con la familia respectiva, para proporcionar el apoyo necesario en estas trágicas circunstancias", añadió.

El ciudadano portugués falleció en el incendio que se produjo anoche en la prisión de Tangerang, una ciudad al oeste de la capital indonesia, que dejó al menos 40 muertos más y decenas de heridos.

"El fuego se propagó rápidamente y no hubo tiempo suficiente para abrir algunas celdas", explicó el ministro de Justicia de Indonesia, Yasonna Laoly, durante una rueda de prensa.

El funcionario añadió que "40 personas murieron en el lugar de los hechos, otra murió de camino al hospital" y que se identificó a ocho detenidos gravemente heridos.

Las autoridades siguen investigando las causas del incendio, pero sospechan que la causa fue un problema eléctrico.