"Esta propuesta fue enviada a los operadores económicos de ambos sectores, para una audiencia de las partes interesadas", dice el regulador en un comunicado, adelantando que "el objetivo es garantizar una mayor flexibilidad en el funcionamiento en el mercado, sin aumento de los costos o riesgos para los consumidores de energía".

Las medidas propuestas -que deberán estar en vigor hasta el final del primer semestre de 2022- "también permiten evitar cualquier problema con la salida de los suministradores del mercado, así como asegurar un acceso más fácil al suministro de energía".

"Al mismo tiempo, preservan la competencia en el mercado energético, limitando cualquier impacto adverso en la liberalización del sector mediante una adecuada contención de los posibles riesgos sistémicos", añade el informe.

ERSE explica que las propuestas con "medidas extraordinarias de actuación" en el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) y en el Sistema Nacional del Gas (SNG) fueron enviadas a los operadores económicos resultan del "contexto actual de los mercados energéticos, tanto nacionales como ibéricos y europeos".

"El funcionamiento de los mercados mayoristas de electricidad y gas natural presenta una reiteración de precios históricamente elevados y en valores que, de forma simplificada, son más de tres veces superiores a los registrados a principios de 2021 y en años anteriores".

Según el regulador, "esta subida de precios sin precedentes y la elevada volatilidad impactan de forma significativa en la actividad de la mayoría de los agentes del sector, en particular de los comercializadores que, a través de su actividad específica, aseguran la conexión entre las referencias mayoristas y minoristas del mercado energético".

"La ERSE siempre ha apostado activamente por la implantación de un modelo saludable de liberalización de los sectores de la electricidad y el gas natural, promoviendo de forma coordinada la defensa de los intereses de los consumidores y el fomento de la competencia en el mercado, en gran medida a través de la entrada de nuevos agentes".

De hecho, "una parte muy significativa de la motivación para la puesta en marcha de los mecanismos de contratación y el correspondiente fomento de la liquidez se dirigió precisamente a este desarrollo del mercado."

En el contexto actual, la ERSE dice que las medidas extraordinarias propuestas tienen como objetivo "aminorar el efecto que la grave situación de precios en el mercado mayorista tiene sobre el mercado portugués, evitando, siempre que sea posible, la pérdida de diversidad por la salida de agentes" y conteniendo "los sistemas de riesgos".

El regulador aclara que estas medidas "tienen un enfoque temporal a más corto plazo y no suponen un aumento de los riesgos ni de las cargas para los consumidores de electricidad o gas natural".

A medio y largo plazo "la adaptación natural de los agentes del mercado reorientará, en la medida necesaria, sus respectivas actuaciones, lo que justifica que las medidas ahora previstas tengan un alcance temporal limitado, hasta el final del primer semestre de 2022".