El texto sustitutivo, relativo a cuatro proyectos de ley (PS, BE, PAN y la diputada no inscrita Cristina Rodrigues) fue aprobado por unanimidad, por la Comisión de Asuntos Constitucionales, Derechos, Libertades y Garantías y pasará ahora a la votación final en el pleno.

Los cuatro proyectos de ley en cuestión proponían cambios en el Estatuto del Donante de Sangre, para acabar con la discriminación de los donantes por su orientación sexual e identidad de género, tras las denuncias de situaciones que persisten.

El texto sustitutivo que se someterá a votación, al que ha tenido acceso Lusa, define que "podrá donar sangre la persona que cumpla los criterios de elegibilidad, previamente definidos de forma objetiva, igualitaria y proporcional por orden del Ministerio de Sanidad, que deberá cumplir con los principios de confidencialidad, equidad y no discriminación".

"Los criterios de elegibilidad definidos previamente no pueden discriminar a los donantes de sangre por su orientación sexual, identidad de género, expresión de género y características sexuales", reza el texto.

También se define, en el artículo de este estatuto sobre la donación de sangre, que "el carácter de las donaciones, es decir, su regularidad, la definición de la unidad de sangre, los intervalos de donación y otros aspectos relacionados con la donación, deben cumplir con los criterios definidos por el organismo responsable, con el fin de garantizar la disponibilidad y accesibilidad de la sangre y los componentes sanguíneos de calidad, seguros y eficaces, que deben respetar los principios de proporcionalidad, equidad y no discriminación".

"Corresponde a los centros de transfusión sanguínea garantizar que los donantes de sangre cumplan todos los criterios de elegibilidad y que estos criterios se apliquen de forma objetiva, equitativa y proporcional a todos los candidatos", dice también el texto.

El texto también define la promoción, por parte del Instituto Portugués de Sangre y Trasplantes "en colaboración con las instituciones educativas", de una campaña anual "para fomentar la donación de sangre por parte de los jóvenes".

Esta campaña "deberá integrarse en los diferentes contextos sociales y promoverse en los diferentes medios de comunicación, utilizando un mensaje sencillo, claro e informado", y deberá "concienciar sobre la no discriminación del donante, con especial énfasis en base a su identidad de género u orientación sexual".