En un comunicado, la institución ha informado de que ha aprobado, "en virtud de las normas sobre ayudas estatales de la Unión Europea, un régimen portugués por valor de 48 millones de euros para apoyar la compra de autobuses de emisiones cero -eléctricos o de hidrógeno-, así como la infraestructura de transporte público relacionada con la recarga y el repostaje, para el sector del transporte público de pasajeros por carretera en las áreas metropolitanas de Lisboa y Oporto".

Esta medida será financiada por el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, la parte central del Fondo de Recuperación Post-Crisis Covid-19, añade Bruselas, señalando que las subvenciones directas no son reembolsables.

Según la información facilitada por Lisboa a Bruselas, "los beneficiarios serán seleccionados mediante un proceso de licitación abierto y transparente".

"La Comisión ha evaluado la medida con arreglo a las normas europeas sobre ayudas estatales y [...] considera que fomentará la adopción de autobuses públicos de pasajeros sin emisiones, contribuyendo así a la reducción de CO2 [dióxido de carbono] y de contaminantes, de acuerdo con los objetivos climáticos y medioambientales de la UE y las metas establecidas por el Pacto Ecológico Europeo", señala el Ejecutivo comunitario.

Según la institución, este apoyo estatal sigue estando "limitado al mínimo necesario, ya que se concederá mediante un proceso de licitación y con las salvaguardias necesarias".

"La Comisión ha llegado a la conclusión de que los efectos positivos del régimen sobre los objetivos medioambientales y climáticos de la UE superan cualquier posible distorsión de la competencia y el comercio causada por el apoyo", añade.