Una de las novedades de la legislación es la creación de un impuesto del 1% sobre los ingresos de las plataformas de streaming que operan en Portugal, como HBO, Netflix, Disney+ y Amazon Prime Vídeo, cuya recaudación se destinará al Instituto del Cine y el Audiovisual (ICA).

Estas plataformas también tendrán la obligación de invertir en la producción cinematográfica y audiovisual en Portugal, concretamente en series y películas, de forma similar a lo que ya ocurre con otros operadores.

Si no es posible determinar el valor de los llamados "beneficios relevantes", estos operadores pagarán una tasa anual de un millón de euros y la obligación de inversión se fija en un máximo de cuatro millones de euros.

El actual canon de audiencia del 4% sobre la emisión de publicidad en las cadenas de televisión, cuyo cobro revierte en el ICA y Cinemateca, cubrirá también los servicios de las plataformas de intercambio de vídeos, como Youtube.