Según el despacho nº 1451/2022, firmado por el subsecretario de Estado y Sanidad, António Lacerda Sales, la decisión se basa en que la vacuna antigripal "debe administrarse anualmente" y en que "los virus de la gripe pueden presentar variaciones que requieren cambios anuales en la composición de la vacuna".

En el contexto de la gripe, el despacho destaca que "las personas de 65 años o más son las más vulnerables a las complicaciones". A ellos se suman otros grupos objetivo prioritarios, definidos en la normativa anual de la Dirección General de Salud.

El Gobierno también recuerda que "la gripe es una enfermedad transmisible que puede desarrollar complicaciones y que puede prevenirse o mitigarse mediante la vacunación", asignando a los Servicios Compartidos del Ministerio de Sanidad "los procedimientos para adquirir las respectivas vacunas".

La vacuna gratuita es válida a partir de la fecha de la firma de la orden, el 27 de enero.