Después de verse obligado a destruir la marquesina del ático de lujo que posee en Lisboa, Cristiano Ronaldo se ha visto obligado a demoler algunas construcciones ilegales en la casa que posee en Gerês, en el embalse de Caniçada, en Terras de Bouro.

Según TVI, el futbolista portugués tenía hasta el 21 de marzo para terminar la demolición del parque infantil construido ilegalmente y de una casa anexa que había construido en la propiedad, pero el plazo fue ampliado hasta el 30 de junio por el Ayuntamiento de Terras de Bouro. Estas obras ya están en marcha y se espera que estén terminadas antes de la fecha límite.

Cristiano Ronaldo se librará así de las acusaciones de delitos de infracción de las normas urbanísticas y de falsificación de documentos, por haber ordenado supuestamente la construcción más allá del espacio autorizado en una zona protegida, señala TVI, que señala que fue la construcción de un pequeño helipuerto lo que llevó al futbolista a cambiar el proyecto detallado, construyendo el citado parque infantil que ahora tiene que ser demolido.

Una vez finalizadas las obras y regularizado todo el proceso, la mansión podrá pasar finalmente a manos de Pepe, jugador luso-brasileño del FC Porto, que ya ha negociado la compra de la propiedad.