La compañía aérea portuguesa EuroAtlantic Airways realizará el nuevo vuelo a la UAPT, saliendo de Lisboa el 21 de abril, con destino a Lublin (Polonia).

El avión saldrá de Lisboa con unas 15 toneladas de medicamentos y generadores para ayudar a los refugiados que se encuentran en la frontera polaca y para los que permanecen en las zonas de conflicto, y regresará el mismo día con 263 refugiados ucranianos, que ya viven en un centro de acogida polaco en Lublin, anunció Iryna Shkira, una de las voluntarias de la asociación.

Iryna Shkira añadió que "la ayuda humanitaria se dirige entonces a Lviv".

Cerca de la frontera polaca, la ciudad de Lviv se ha librado de las fuerzas rusas, pero se han producido varios ataques en los alrededores. Lviv es uno de los principales corredores de escape para los desplazados y refugiados de las zonas más afectadas por la guerra.

Este será el quinto vuelo organizado por la asociación, nacida de la voluntad de un grupo de personas que se reunieron en una protesta frente a la embajada rusa en Lisboa.

Los cuatro vuelos humanitarios realizados hasta ahora han traído a Portugal a 1.012 refugiados, en su mayoría mujeres, niños, ancianos y algunas personas con discapacidad, ya que la mayoría de los hombres fueron movilizados para la guerra.

La elección de Portugal

La experiencia de la asociación revela que cerca de la mitad de los refugiados eligieron Portugal porque tienen familia o amigos, acabando por quedarse en sus casas.

Después del primer vuelo, el 10 de marzo, "todo fue mucho más fácil", recuerda la voluntaria. En el tercer viaje, empezaron a aparecer listas de espera: "Nuestros vuelos se llenan en minutos. Teníamos unas mil personas en la lista de espera", dijo Iryna Shkira, añadiendo que la asociación mantiene el contacto con las personas de la lista y algunas acabaron viniendo en autobús.

En Portugal, los cerca de 60 voluntarios de la asociación intentan acompañar a las familias desde su llegada: "Acabamos siendo una especie de mentores para ayudar en lo que haga falta", dijo Iryna Shkira.

Trauma

Hay ayuda para tramitar la documentación, para gestionar el alojamiento, el apoyo social, las escuelas, para aprender portugués o inglés e incluso para encontrar un trabajo, pero, según la voluntaria, lo más difícil en estos momentos es recuperarse del trauma.

"Sólo después de unas semanas la gente empieza a darse cuenta de que está a salvo. La mayoría son de la parte oriental de Ucrania, que es la zona más afectada por la guerra y, por tanto, necesitan apoyo psicológico", explicó Iryna Shkira, garantizando que se les está prestando ese apoyo.

A través de varias colaboraciones, la asociación ha conseguido organizar centros de acogida en Leiria, Azambuja, Mafra, Fundão y Viseu, pero también hay quienes se quedan con las personas que han decidido abandonar sus hogares.

El mejor ejemplo

"Portugal es uno de los mejores ejemplos de acogida de Europa. Las personas a las que hemos seguido nos dicen que, aunque Portugal tenga un apoyo social un poco menor, no hay comparación en la forma en que son recibidos aquí, con tanto cariño. Portugal es uno de los mejores ejemplos", aseguró Iryna Shkira.