Cinco familias que vivían en el barrio de Carlos Botelho, en la zona de Olaias, en Lisboa, fueron desalojadas recientemente de las casas que ocupaban ilegalmente. Gebalis, la empresa que gestiona las viviendas municipales, fue acusada por los vecinos de desalojar a las personas "de un día para otro" y "sin ningún tipo de diálogo". Gebalis respondió alegando que se trataba de situaciones de "ocupación abusiva", y advirtió de la existencia de más de 800 viviendas ocupadas ilegalmente en los 66 barrios que gestiona. Una cifra que confirmó Filipa Roseta, concejala de Vivienda.

"Es un caso dramático, tenemos 800 viviendas ocupadas sin título, ilegalmente. Es una herencia pesada", dijo la edil, citada por Público.

Durante la reunión, los partidos de la oposición quisieron saber, entre otras cosas, qué respuestas se dieron a las cinco familias desalojadas. Y también cuestionaron la necesidad de la presencia de un número tan elevado de policías en el lugar, escribe la publicación.

Ricardo Moreira, concejal de BE, dijo, por ejemplo, que el proceso de desalojo no respetó la Ley Básica de la Vivienda, ya que no hubo seguimiento social y judicial ni alojamiento alternativo para estas familias.

En respuesta a estas y otras acusaciones, Filipa Roseta rechazó que las familias no hubieran sido acompañadas y añadió que las cinco familias en cuestión fueron contactadas por la Santa Casa da Misericórdia tras el desalojo. La alcaldesa también señaló que la Ley Básica de la Vivienda "distingue claramente entre quien tiene un título para estar en una vivienda y quien no".