La campaña, bajo la responsabilidad de la Autoridad Nacional de Seguridad Vial (ANSR), la Guardia Nacional Republicana (GNR) y la Policía de Seguridad Pública (PSP), se llevó a cabo del 26 de abril al 2 de mayo y tuvo como objetivo alertar a los conductores sobre los riesgos del exceso de velocidad, una de las principales causas de los accidentes de tráfico.

Según la ANSR, se inspeccionaron 2.004.836 vehículos para el control de la velocidad por radar, el 85% de ellos por el SINCRO - Sistema Nacional de Control de Velocidad.

De los vehículos inspeccionados, 14.586 tenían exceso de velocidad, de los cuales 6.463 fueron detectados por los radares de las Fuerzas de Seguridad y 8.123 por la ANSR.

Durante el período de la campaña, en el territorio continental, se produjeron un total de 1.831 accidentes, con el resultado de ocho víctimas mortales, 28 heridos graves y 419 heridos leves.

En comparación con el mismo período de 2021, hubo 274 accidentes menos, seis víctimas mortales más, cuatro heridos graves menos y 219 heridos leves menos, según la ANSR.

Los accidentes que originaron las víctimas mortales se produjeron principalmente en los distritos de Braganza, Braga, Aveiro, Viseu, y también en los distritos de Lisboa y Beja.