Según un informe de ECO, durante la última semana se han cancelado al menos dos trenes al día porque no hay suficiente personal para comprobar si los pasajeros tienen billete a bordo.

De los 30 revisores de billetes que hay en la región del Algarve, cerca de un tercio no está disponible por baja laboral o por aislamiento debido al coronavirus, según el líder del Sindicato Ferroviario de Revisión Comercial Itinerante, Luís Bravo.

"A pesar de lo poco que se habla, los revisores se han visto especialmente afectados por la sexta ola de la pandemia. Esto ha obligado a la supresión de trenes en la Línea del Algarve", afirma el dirigente sindical.

Para atenuar el impacto, la compañía ha intentado sustituir los trenes cancelados por autobuses. Por ejemplo, en la ruta entre Lagos y Faro se utilizan dos vehículos, ambos con salida de la estación de Lagos: el autobús 1 va a Tunes con paradas en Portimão, Estômbar, Silves y Algoz; el autobús 2 va a Faro, con paradas en Portimão, Tunes, Albufeira, Boliqueime y Loulé.