Según un informe de la CNN Portugal, la confirmación fue dada por el Gobierno, teniendo en cuenta la ausencia de medidas específicas para combatir la enfermedad en la ordenanza, publicada este mes de mayo, que regula la temporada de baño de 2022, incluyendo la distancia física entre los bañistas y el uso de una máscara para acceder a la playa.

Este año sólo se recomienda el sentido común y ninguna de las normas es obligatoria. Unas normas que en los últimos años, de no cumplirse, podrían suponer una multa de entre 50 y 100 euros para los ciudadanos y de 500 a 1.000 euros para las empresas.

Vuelta a la normalidad

La Federación de Concesionarios de Playas celebra el levantamiento de las restricciones. "Ya podemos trabajar al 100%, incluso podemos hacer eventos, como fiestas de boda", dijo a CNN Portugal João Carreira, presidente de esa federación, admitiendo que es bueno volver a la normalidad: "Tenemos playas seguras, queremos recibir a los bañistas y turistas con seguridad y dar una buena imagen del país".

Máscaras

A diferencia de años anteriores, no se obligará a nadie a llevar máscara, ni para acceder a la playa, ni en los chiringuitos y restaurantes, ni siquiera para acceder al baño. Sin embargo, dice João Carreira, algunos negocios seguirán utilizando máscaras. Cualquier bañista que quiera llevar una máscara también puede hacerlo, pero sin ninguna obligación.

Sombrillas y toldos

Ya no se aplica la distancia de tres metros entre toldos y sombrillas que estaba prevista como forma de seguridad durante la pandemia. Ahora, los concesionarios pueden volver a las normas anteriores y los bañistas pueden poner sus sombrillas donde quieran. Si un grupo de 10 personas quiere colocar su sombrilla al lado de otra, puede hacerlo, independientemente de la distancia.

Sin embargo, en muchas playas se mantendrá la colocación de toldos con distancias de tres metros, aunque no es obligatorio. Esto, explicó João Carreira, es simplemente una cuestión de logística. Es decir, en la mayoría de los casos, los toldos y otros equipamientos fueron montados antes de la publicación de la ordenanza y, por lo tanto, siguen cumpliendo las normas de distanciamiento verificadas en años anteriores.

Distancia social

Durante dos años, se recomendó que los bañistas mantuvieran una distancia de 1,5 metros de otras personas, tanto en la arena como en el mar. A menos que fueran del mismo grupo. Esta recomendación también ha finalizado.

Deportes en la playa

En cuanto a los deportes en la playa, ya no existen las normas aplicadas en los dos últimos años. Las clases de surf y similares ya no están limitadas y los deportes están siempre permitidos.