En declaraciones a Lusa, el presidente de la Asociación Sindical de Jefes del Cuerpo de Guardias de Prisiones (ASCCGP), Hermínio Barradas, se refirió a una situación general para después de las 10 de la mañana, pero dijo que ya había recibido información de una cooperación del 100% al menos en estas tres prisiones.

"La gente se está yendo y hay cierta confusión", dijo el funcionario, quien agregó que "no tenemos medios de servicios mínimos". Los jefes que se declaran en huelga se van y los guardias se quedan solos, con el director".

Según Barradas, "el viernes hubo otra huelga y quedaron dos [jefes] en las cárceles grandes y uno en las pequeñas", pero "hoy no queda ningún jefe en ninguna cárcel, mientras se declaren en huelga".

En cuanto a la seguridad dentro de las cárceles, Hermínio Barradas dijo que "no podemos dejar de tener en cuenta que ha terminado una huelga de cinco días del sindicato más grande, en la que los reclusos sólo estuvieron dos horas en el patio y todas las actividades están pendientes desde el martes".

El motivo de la huelga está relacionado con la exigencia de un nuevo estatuto profesional, el pago y otras reivindicaciones. En un comunicado sobre los motivos de la huelga, la ASCCGP señaló la "inactividad, apatía y desprecio del Ministerio de Justicia ante los problemas del sistema penitenciario", criticando además la "decisión del Gobierno de seguir ignorando la existencia de una falta de personal sin precedentes que supone un riesgo".

Según la asociación sindical, los jefes de guardia de prisiones quieren la creación de un nuevo estatuto profesional, la regulación de la evaluación del desempeño del cuerpo de guardias de prisiones, la apertura de oposiciones para todas las categorías, el pago del complemento de seguridad de las prisiones y la resolución de los problemas estructurales del sistema penitenciario.