En declaraciones a los periodistas, José Luís Carneiro ha recordado que "todas las previsiones climáticas y meteorológicas apuntan a un 2023 y 2024 aún más exigente", en el que deberían producirse "incendios cada vez más extremos".

"No podemos esperar a abril, mayo o junio", advirtió, explicando que la inversión pública prevista en esta materia para el próximo año forma parte del "esfuerzo nacional" asumido por el ejecutivo de António Costa.

Por ello, es importante, según el ministro de Administración Interior, "trabajar en la prevención con mucha antelación".

"Son más de 250 millones de euros que ilustran bien el apoyo de este Gobierno a los bomberos y la prioridad dada a la prevención y lucha contra los incendios rurales", reiteró José Luís Carneiro.

Para el Dispositivo Especial de Lucha contra los Incendios Rurales (DECIR) están previstos 52,7 millones de euros, dijo.

"El Gobierno portugués va a seguir, en 2023, una senda de refuerzo de los medios para la protección civil. Vamos a pasar de 29,7 millones de euros de financiación permanente a los cuerpos de bomberos a 31,7 millones de euros, lo que supone un aumento del 6,7% respecto a 2022", ha subrayado el ministro.

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