Según el documento enviado al Gobierno, a las secretarías regionales y a las administraciones portuarias, los trabajadores de los puertos del continente y de Madeira estarán en huelga "desde las 00:00 del 22 de diciembre hasta las 24:00 del 23 de diciembre", "desde las 00:00 del 27 de diciembre hasta las 24:00 del 29" y "desde las 00:00 hasta las 24:00 de los días 2, 6, 9, 13, 16, 20, 23, 27 y 30 de enero".

"En lo que respecta a los buques de carga procedentes o con destino a puertos de las regiones autónomas de Madeira y Azores, las respectivas operaciones se garantizarán en los días de huelga indicados anteriormente en el período comprendido entre las 08:00 y las 17:00, no debiendo iniciarse ninguna operación que no pueda ser completada o interrumpida fuera del período definido", indicó el sindicato.

En las Azores, "no se realizarán operaciones ni actividades en los períodos comprendidos entre las 08:00 y las 10:00 y las 14:00 y las 16:00, de lunes a viernes, los días 22, 23, 27 Los días 2, 6, 9, 13, 16, 20, 23, 27 y 30 de enero".

También en las Azores, en esos días, "no se prestarán horas extraordinarias de lunes a viernes, incluido el periodo de 00:00 a 08:00", ni "se prestará servicio alguno a los cruceros".

El sindicato acusa a las administraciones portuarias de "total falta de disponibilidad" para discutir las propuestas de revisión salarial para 2023, habiendo realizado el SNTAP "varias solicitudes de reunión" que quedaron sin respuesta, "concretamente por parte de las administraciones de Sines y Lisboa".

Los representantes de los trabajadores señalan también la "subsistencia de graves situaciones" de violación de la legislación y del convenio colectivo en vigor, incluyendo un caso que califican de "acoso laboral" a un trabajador del puerto de Sines.

Los servicios mínimos propuestos por el sindicato incluyen el transporte de medicamentos y material hospitalario, mercancías peligrosas, carga y descarga de animales vivos y alimentos perecederos, intervenciones esenciales en caso de incendio, abordaje, aguas abiertas y varada de buques, petroleros o buques con carga peligrosa a bordo, por razones de seguridad, servicios de búnker y buques humanitarios y militares portugueses, así como el movimiento de buques necesario para evitar una interrupción en el suministro de aeronaves militares y, en caso necesario, el suministro de combustible.

También se incluye el movimiento de buques para el desembarco de enfermos, heridos graves o fallecidos, el mantenimiento de las condiciones de seguridad en el puerto y la intervención en caso de incidentes, y, en Porto Santo (Madeira), se garantizarán las operaciones de los buques de combustible.