En declaraciones a Lusa, el capitán del puerto y comandante local de la Policía Marítima de Lagos, Hugo da Guia, afirmó que "la zona estaba debidamente señalizada, estando prohibido el acceso al lugar del derrumbe".

El derrumbe, que se produjo en la madrugada del sábado, "desplazó un importante volumen de sedimentos", destruyendo el acceso a la escalinata de la Praia do Pinhão, situada entre las playas de Dona Ana dos Estudantes.

La alerta fue dada a las autoridades marítimas por un ciudadano en la mañana del mismo día, dijo el funcionario.

Según Hugo da Guia, la Policía Marítima intensificará el patrullaje diario del lugar, "para concienciar a la gente del peligro y garantizar la seguridad de los que pasen por allí".


"La gente siempre tiene curiosidad por ir a hacer fotografías, pero es importante recordar que cualquier persona que pase o permanezca en la zona cerrada puede ser objeto de una infracción administrativa".

Hugo da Guia añadió que el acceso a la escalera del Pinhão "no estaba impedido, pero había señales en el lugar advirtiendo del riesgo" de derrumbe.

El capitán del puerto de Lagos advirtió del riesgo de que la gente accediera al lugar debido a la inestabilidad del acantilado, señalando que "anoche se registró un pequeño movimiento de escombros en la misma zona".

El derrumbe de parte del acantilado de Pinhão fue comunicado a la Agencia Portuguesa de Medio Ambiente (APA), entidad que vigila los acantilados de la costa portuguesa.

Lusa se puso en contacto con la APA para obtener más aclaraciones sobre lo ocurrido, pero de momento no ha recibido respuesta.