En su discurso, Marcelo Rebelo de Sousa señaló tres razones que explican el éxito turístico de este año en Portugal, a saber, el hecho de que existe "una marca muy fuerte llamada Portugal", algo que explica al haber aprendido de los contactos que ha hecho "con diferentes economías y sociedades, a saber, europea, americana, africana y asiática".

"Podemos hacer mucho más [por la marca] y he escuchado ideas para hacer más, pero la verdad es que las hay", asegura.

En su opinión, "esto es un logro del régimen, no del gobierno A, B, C o D: es el resultado del trabajo realizado durante la última década y media. Varios gobiernos con pensamientos completamente distintos contribuyeron de forma diferente, pero importante, a este refuerzo".

En un segundo punto, atribuye el éxito de este año del turismo en Portugal al hecho de que el país fue percibido mundialmente por haber gestionado bien la pandemia, afirmando que "la forma en que tratamos la pandemia consolidó la idea de que en Portugal hay estructuras sanitarias que pueden funcionar bien vinculadas al turismo".

En el tercer punto, el Presidente de la República afirmó que el turismo portugués "se benefició de la guerra", ya que fue "visto" como un lugar de seguridad, "cercano pero distante" del conflicto.

"Esto hizo que Portugal, que ya tenía una reputación de paz y seguridad, se convirtiera en un destino más seguro en términos relativos", dijo.