"La vecindad coexiste y esa coexistencia tiene que estar debidamente regulada y no ser una oportunidad para el crimen organizado y una amenaza para la vida de todos aquellos que quieren encontrar nuevas oportunidades de vida al otro lado del Mediterráneo", dijo António Costa a Lusa, al margen de la 36ª cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Africana (UA), que concluyó ayer en Abeba, y en la que participó como observador, siendo el único funcionario no africano presente.

Paralelamente, es necesario definir vías legales de migración, argumentó.

"Tenemos que encontrar aquí una solución que sea positiva para todos, porque Europa necesita sin duda más recursos humanos" y "África tiene abundantes recursos humanos", dijo el jefe del Gobierno.

Pero "por otro lado, Europa también tiene que encontrar la manera de ayudarla a crear nuevos puestos de trabajo en el continente africano para que no tengamos simplemente una pérdida de capacidad de recursos humanos en el continente africano", añadió.

Las nuevas líneas estratégicas de crecimiento de la Unión Europea son también una oportunidad para esta inversión, ya que la pandemia del covid-19 ha creado limitaciones logísticas y ha afectado a muchas industrias europeas que se habían trasladado a Asia.

"Tiene sentido traer de vuelta a Europa un conjunto de producciones industriales que se han trasladado a Asia y que pueden ubicarse en Europa", pero "muchas también pueden ubicarse en el continente africano, contribuyendo al desarrollo del continente".

Esto ayuda a "crear puestos de trabajo que dan esperanza a los jóvenes de este continente y que no están condenados a pensar que sólo poniendo en peligro sus vidas cruzando el Mediterráneo pueden encontrar un trabajo decente", dijo António Costa, que también mantuvo varias reuniones bilaterales en Abeba.

"A pesar de todos los trastornos que la guerra [en Ucrania] ha introducido a lo largo de este año en las relaciones entre África y Europa, los proyectos estratégicos que hace un año propusimos en la Cumbre UE/UA han avanzado", dijo Costa.

Hay una "necesidad de dar un nuevo impulso en la realización de estos proyectos, y más porque Europa, más que nunca, necesita diversificar sus fuentes de energía, pero también porque necesitamos invertir fuertemente para dotar al continente más joven del mundo", concluyó el portugués.