La disminución del volumen de agua se observó en las cuencas del Duero, Mondego, Arade, Mira, Ave y Lima y el aumento en las cuencas del Tajo, Guadiana, Sado, Oeste y Cávado, indica el informe mensual del Sistema Nacional de Información de Recursos Hídricos(SNIRH).

La cuenca del Barlavento se mantuvo a finales de noviembre en el mismo valor que tenía el último día de octubre, el 7,6% de su capacidad, y sigue siendo la que menos agua almacena en Portugal continental.

Después de Barlavento, las cuencas de Arade, con un 24,7 por ciento, y Mira, con un 30,8 por ciento, son las que menos agua retienen.

Con la mayor cantidad de agua almacenada se encuentra la cuenca del Cávado, con el 88,4 por ciento, seguida de la cuenca del Ave, con el 81 por ciento, y la cuenca del Duero, con el 79,5 por ciento.

La cuenca que tuvo mayor pérdida de agua acumulada fue la del Ave, que pasó del 99,6 por ciento a finales de octubre al 81 por ciento a finales de noviembre. La que tuvo mayor ganancia fue la del Cávado, que pasó del 83,3 por ciento al 88,4 por ciento de su capacidad.

El informe mensual de almacenamiento de los embalses de Portugal continental indica también que de los 60 embalses controlados, 15 tenían, el último día de noviembre, una disponibilidad de agua superior al 80% del volumen total y 17 una disponibilidad inferior al 40%.

Cada cuenca hidrográfica puede corresponder a más de un embalse.

El informe del SNIRH indica que los almacenamientos del último mes por cuenca hidrográfica son superiores a la media de noviembre (1990/91 a 2022/23), con excepción de las cuencas del Mondego, Sado, Guadiana, Mira, Ribeiras do Algarve y Arade.