La enfermedad de Alzheimer, como todas las demencias, empeora con el tiempo y no existe cura conocida. Casi 6 millones de estadounidenses padecen la enfermedad de Alzheimer. La enfermedad de Alzheimer destruye las células cerebrales causando problemas de memoria, pensamiento y comportamiento que pueden ser lo suficientemente graves como para afectar al trabajo, las aficiones de toda la vida y la vida social. Con el tiempo, puede afectar a la capacidad de llevar a cabo las actividades cotidianas. En la actualidad, es la sexta causa de muerte en Estados Unidos. Es la quinta causa de muerte entre los mayores de 65 años.

Las personas con enfermedad de Alzheimer y demencias afines suelen estar al cuidado de familiares o amigos. La mayoría (80%) de las personas con enfermedad de Alzheimer y demencias afines reciben cuidados en su domicilio. Cada año, más de 16 millones de estadounidenses proporcionan más de 17 mil millones de horas de cuidados no remunerados a familiares y amigos con enfermedad de Alzheimer y demencias relacionadas. En 2019, se estima que estos cuidadores proporcionarán 18.500 millones de horas de cuidados. Aproximadamente dos tercios de los cuidadores de personas con demencia son mujeres, aproximadamente uno de cada tres cuidadores (34%) tiene 65 años o más, y aproximadamente una cuarta parte de los cuidadores de personas con demencia son cuidadores de la "generación sándwich", lo que significa que no solo cuidan a un padre anciano, sino también a hijos menores de 18 años.

Los cuidadores de personas con Alzheimer y demencias relacionadas proporcionan cuidados durante más tiempo que los cuidadores de personas con otros tipos de enfermedades (79% frente a 66%). Bastante más de la mitad (57%) de los cuidadores familiares de personas con Alzheimer y demencias afines prestan cuidados durante cuatro años o más. Más de seis de cada diez (63%) cuidadores de personas con Alzheimer esperan seguir teniendo responsabilidades de cuidado durante los próximos 5 años, en comparación con menos de la mitad de los cuidadores de personas sin demencia (49%).

Las exigencias de los cuidados pueden limitar la capacidad del cuidador para cuidar de sí mismo. Los cuidadores familiares de personas con Alzheimer y demencias relacionadas tienen un mayor riesgo de sufrir ansiedad, depresión y peor calidad de vida que los cuidadores de personas con otras enfermedades.

La pérdida de memoria que perturba la vida cotidiana puede ser un síntoma de Alzheimer o de otra demencia. El Alzheimer es una enfermedad cerebral que provoca un lento deterioro de la memoria, el pensamiento y la capacidad de razonamiento. Existen 10 signos y síntomas de alerta. Si nota alguno de ellos, no lo ignore. Pida cita con su médico.

  • Pérdida de memoria que interrumpe
    la vida cotidiana.
  • Dificultades para planificar o
    resolver problemas.
  • Dificultad para completar tareas familiares.
  • Confusión con el tiempo o el lugar.
  • Dificultad para comprender imágenes visuales y relaciones espaciales.
  • Nuevos problemas con las palabras al hablar o escribir.
  • Extravío de objetos y pérdida de la capacidad de volver sobre los pasos dados.
  • Disminución o falta de juicio.
  • Retirada del trabajo o de las actividades sociales
    .

  • Cambios de humor y
    personalidad.

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